
El regreso musical de Britney Spears era un hecho palpable desde el lanzamiento de su último álbum, “Blackout”, el disco que resucitó su fama de Princesa del Pop y que ha vuelto a llevar a la cantante hasta lo más alto de las listas de ventas estadounidenses. Sin embargo, su imagen continuaba seriamente dañada por su escandaloso comportamiento público, sus litigios en torno a la custodia de sus dos hijos o sus crisis antes y después de someterse a una desintoxicación. Su aparición en una popular “sitcom” estadounidense buscaba precisamente mejorar ese aspecto de la cantante.
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